Pintura y demás

2021 — 2024 - Selección





Desgranar el lenguaje, desglosar el elote (2024). Sopa de letras sobre mazorcas agroecológicas cosechadas en espacios periurbanos de la ZMG.


Investigación en curso (2024). Ilustración digital.


Mirar abajo no es voltear atrás sino es observar este futuro debajo del guión en la semilla oculta que se expande en la oscuridad con olor a incierto y a tierra mojada de brotes posibles, de la serie Instrucciones para escribir un guión con un jardín (2024). Tierra sobre lienzo. 59 x 65 cm



Unilínea (tierra fértil) (2024). Tierra y pigmento de pericón sobre lienzo. 60 x 70 cm

Mapeo de una constelación (2023). Pieza sonora. 3:04 min.
Escucha.


Sutura 001 (2023). Lana teñida con cáscaras de cebolla morada y cerámica de alta temperatura. Medidas variables.

Veo cierta similitud en la infinita maleabilidad del tejido y la cerámica. Y más aún en el teñido y el horneado, los cambios de colores provocados por el calor. Un cobijo elemental.
El encuentro de la sutura entre las perforaciones, huecos violentos, crea nuevos espacios, nuevos mundos orgánicos.




Unilínea (2023). Acrílico y medio sobre lino. 120 x 120 cm.

Estos trazos, o querré decir trazo, llevo haciéndolo automáticamente por años en mi libreta, apuntes vagos, ideas escritas. Quise llevar ese acto secundario a lo macro. Una sola línea, un nudo en realidad no es una atadura, es una incrustación de un círculo en el espacio euclídeo. Cíclico. Entropía.



El azoro conlleva a una sutura (2023). Tierra, acrílico, óleos grasos, lana y algodón teñido de cascadas de cebolla morada sobre lienzo. 100 x 120 cm.



Migración (2023). Grabado sobre cerámica de media temperatura. 20 x 30 cm.

Somos milpa (2022). Pintura a base de tierra de Tapalpa, citrino, amatista y cuarzo blanco sobre madera
90 x 60 cm

El maíz ha tenido un valor significativo desde la época prehispánica. Es el motor del país, es el medio base del paso de energía de la naturaleza hacia el ser humano. Somos milpa.
Abrazar nuestras diferencias es un acto de amor colectivo. Se vuelve una chispa que emerge y se vuelve llamarada de rebeldía, el agente de cambio que abrasa nuestras discrepancias y vulnerabilidades. Encontremos este abrazo con las hojas abiertas.
Trabajo en colaboración con artesana en lapidaria Marcela del Sol. Proyecto realizado con el apoyo de Secretaría de Cultura Federal, Secretaría de Cultura Jalisco, Faro Promotora Cultural y Persona Nahual, para la exposición Fusión Artesanal.


Apapacho (2022). Acrílico y pasteles grasos sobre lienzo. 100 x 100 cm. 

El tercer ojo (2021). Animación. 30 s. 450 frames dibujados individualmente.

Te soltaré bajo el umbral de la libertad (2021). Acrílico e hilo bordado sobre lienzo. 80 x 80 cm.

La independencia es algo consubstancial a la humanidad. A nivel político con la lucha contra la sujeción de un régimen externo, a nivel sociocultural con la búsqueda de un sentido de identidad colectiva, o a nivel personal con la ímpetu de tener una personalidad "única".
El ave como símbolo de libertad, un ser que puede volar lejos para (re)construir su espacio, escapando dentro de su misma temporalidad. Cada quien carga con la voluntad de soltar a su ave. No obstante, existe una jaula inherente, construida bajo la idea de mantener el "equilibrio", por lo que parece que al ser humano le importa más el orden que la libertad. Salir físicamente de tu nido no implica salir de tu aura, pues lo llevamos arraigado, lo llevamos enraizado.
Nos llaman a perseguir una libertad de la que no se puede escapar, una pseudolibertad que ha muchos les ha dado tranquilidad auténtica, pero a mí me ha otorgado una pseudoserenidad.
Sueño con soltar a mi ave en una libertad incondicionada.
Sin imposiciones, donde ya no me pierda entre sueños que los dogmas sociales aturden.
Sin incertidumbre de la intangibilidad de mi ser.
Hay que tener ambos ojos abiertos para inquirir dónde está ese verdadero umbral de la libertad. ¿Se puede llegar en vida? Y si sí, ¿dónde?



Soy agua y del desierto vengo (2021). Acrílico e hilo bordado sobre lienzo. 90 x 90 cm.

El desierto es un espacio dicotómico. Un lugar solitario donde las temperaturas extremas, que cambian según la presencia de los cuerpos celestes, determinan el estilo de la vida silvestre. 
Un lugar que cuando cae la noche, se vuelve frío y desolado, pero con cada amanecer, la vida renace y el calor del sol penetra la piel de la fauna.
Un lugar donde las cactáceas son quienes están presentes todo el tiempo debido a su incapacidad de desplazamiento, desarrollando una adaptación a los climas extremos para resistir y existir. 
Es parte de la condición humana aprender a darle un propósito a nuestra existencia, y a pesar de su maleabilidad, mantenerla presente en los altibajos de la vida. Aprender a adaptarnos como las cactáceas. Albergar agua en un lugar que se creía seco. Esa chispa de potencial fructífero siempre radica en el interior. Soy agua y del desierto vengo.